EMPRESARIO VINCULADO A BORGE: Gobierno de la 4T adjudica licitación para estadio en Cancún por 176.8 mdp

  • El fallo establece que la empresa Constructora Maíz Mier fue la que presentó “las mejores condiciones legales, técnicas, económicas y administrativas en cuanto a precio, calidad y financiamiento, oportunidad y demás requisitos”.
  • José “Pepe” Maíz García, es actualmente presidente del club Sultanes de Monterrey y hasta hace un par de años fue presidente del consejo directivo de Liga Mexicana de Beisbol, fue diputado del PRI por Nuevo León y es propietario de varias empresas, entre otras, Constructora Maíz Mier.

Redacción/pdC

CANCÚN, 30 de julio de 2021.- La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) resolvió entregar a la firma Constructora Maíz Mier el proyecto de Construcción de Espacio Público y Estadio de Beisbol en Cancún, por un monto de 176.8 millones de pesos.

El fallo establece que esta empresa fue la que presentó las mejores condiciones legales, técnicas, económicas y administrativas en cuanto a precio, calidad, financiamiento, oportunidad y demás requisitos incluidos en la licitación pública.

El plazo de ejecución del proyecto integral de obra pública a precio alzado será de 170 días naturales, contados a partir del día hábil siguiente al de la formalización del contrato respectivo, se lee en el fallo.

Las empresas participantes fueron Pavimentos y Asfaltos Megar, Rodjuan Construcciones, Tucán Infraestructura, Grupaem México, Construcciones Herbre, Grupo Internacional Tamaulipas, Edificación Integral del Noroeste e Infraestructura y Publicidad.

En los documentos de la licitación se indica que el estado actual del campo de béisbol que se renovará en su totalidad pone en riesgo la vida de los aficionados, porque las columnas y trabes presentan daños, fisuras y un armado deteriorado.

El estadio en cuestión es el Beto Ávila, donde juegan los Tigres de Quintana Roo, que será renovado en su totalidad.

En los datos técnicos dados a conocer por la Sedatu en el proceso de licitación, se expone que el inmueble ocupa una superficie de 26,000 metros cuadrados, de las cuales se encuentran cinco áreas perimetrales al campo, dos áreas de gradas generales al fondo del campo, dos de preferente al centro del campo y un área principal con palcos.

Luego del anuncio del cierre parcial del estadio de beisbol Beto Ávila, debido a una remodelación con recursos del Gobierno Federal, aficionados diferentes disciplinas deportivas, como softbol, tenis y baloncesto expresaron su desacuerdo por estas obras que iniciaron el pasado lunes 19 de julio.

Antecedentes

Se indica que el estadio construido por una empresa ligada a Gabriel Mendicuti Loria, “fue inaugurado el 23 de noviembre de 1980, con una capacidad de 4,500 espectadores, teniendo a la fecha una vida útil de 41 años. Con el tiempo se remodeló y se amplió su capacidad hasta los 9,500 espectadores”.

El documento añade que el estadio presenta ampliaciones con diferentes materiales como acero y concreto en al área de palcos y ampliación de gradas, “de las cuales no se tiene información como son planos arquitectónicos, estructurales y memorias de cálculo”.

Asimismo, sobre las generalidades del proyecto expone además que personal de la Sedatu realizó una revisión ocular al inmueble los días 21 al 26 de marzo del 2021, para verificar su estado actual.

El informe elaborado arrojó que las estructuras presentan ya un deterioro por las inclemencias del tiempo, así como una falta de mantenimiento, elementos de fijación y terminado.

“Se observa corrosión extrema en la base de las luminarias perimetrales y se aprecia la falta de mantenimiento y de refuerzo para las áreas que presentan daños”, se lee en el documento.

Por cierto, a Gabriel Mendicuti se le recuerda que en su vida política y empresarial ha tenido diferentes carpetas de investigación, procesos judiciales en donde se señalan denuncias por desvío de recursos, desempeño irregular de la función pública y por vinculación a contratos irregulares.

Recientemente, a su hijo Gabriel Mendicuti Zapata se le abrió una carpeta de investigación por el delito de despojo y daños ambientales por un predio llamado “El Pitayo”.

El pasado 7 de junio fue vinculado a proceso, por el delito de despojo.

Actualmente está libre bajo causión, debiendo firmar cada 15 días en la Secretaría de Seguridad Pública. Mendicuti Zapata, quien además es el coordinador de la campaña de su padre, es acusado de haberse apoderado del predio “El Pitayo”, ubicado al norponiente de Playa del Carmen, en donde además presuntamente ha extraído material pétreo

En toda esta zona del municipio, la Secretaría de Desarrollo Urbano, Territorial y Urbano (Sedatu) ha realizado labor de mediciones, para la regularización de estos terrenos, lo que ha propiciado una serie de invasiones y despojos, con el fin de poder ostentarse como posesionarios.

Tal es el caso con el preido “El Pitayo”, en donde una pareja de cuidadores fue expulsada a la fuerza, presuntamente por Gabriel Mendicuti, con el auxilio de policías. A pesar de ello, el acusado no pudo acreditar la posesión del predio en el juicio llevado en su contra, por lo que el juez determinó que existían elementos suficientes para sujetarlo a proceso.

Mendicuti Zapata quedó en libertad bajo fianza, luego de pagar una caución de 30 mil pesos como garantía. Además, debe presentarse a firmar cada 15 días en la Secretaría de Seguridad Pública. Gabriel Mendicuti Loría, padre del acusado, quien fue presidente municipal y ex secretario de Gobierno del Gobierno del Estado, posee grandes extensiones de terrenos en Solidaridad.

Gabriel Mendicuti Loria estuvo en prisión, acusado del delito de Desempeño Irregular de la Función Pública por el presunto desvío de 534 millones de pesos de recursos públicos, aunque fue absuelto de las acusaciones.

Socios de Borge

En 2016 cuando su equipo, Sultanes de Monterrey fue eliminado en los playoff por Toros de Tijuana, José Maiz declaró a varios medios de comunicación (como dueño y presidente de un club y también como presidente del consejo directivo de Liga Mexicana) que al equipo de Tigres de Quintana Roo el gobierno de ese estado, entonces a cargo de Roberto Borge Angulo, le daba 50 millones de pesos para operar y que a él no le dan ahí (Monterrey, Nuevo León) ni un pinche centavo (sic).

Existen denuncias penales donde también se pide investigar a los empresarios Edgar Manuel Montoya Méndez y Andrés Maíz Arce, por considerar que ambos se vieron favorecidos por contratos concedidos de forma ilegal, debido a los vínculos personales que tenían con los ex mandatarios, Roberto Borge y Javier Duarte, quienes enfrentan encarcelados procesos penales por corrupción, lavado de dinero y desvió de recursos públicos, entre otros delitos.

El 27 de marzo de 2016, el entonces gobernador Roberto Borge Angulo le presentó al presidente Enrique Peña Nieto a uno de sus “empresarios favoritos”, a su amigo y asesor, Andrés Maíz Arce, (sobrino de “Pepe” Maíz) y además, ignorando el conflicto de interés, lo publicitó en las redes sociales.

Andrés Maíz Arce, sobrino de Pepe Maíz, diputado local, presidente de los Sultanes de Monterrey y director general de la Constructora Maíz Mier, también fue uno de los empresarios relacionados con la empresa Grupo Rumega que, precisamente al principio de la administración de Roberto Borge, fue una de las más beneficiadas con contratos y licitaciones dadas a modo.

Detrás del Grupo Rumega, empresa beneficiada con contratos millonarios, aparecían nombres de amigos, compadres y operadores políticos del Gobernador Borge, entre los cuales estaba el propio Andrés Maíz Arce, quien fue funcionario del Gobierno de Nuevo León con José González Parás y fue asesor del Gobierno de Roberto Borge, junto con Edgar Méndez, operador político del entonces mandatario estatal, otro de los socios de la empresa GD Rumega, bajo sospecha

Creada en mayo del 2011, apenas un mes después de que el Gobernador Roberto Borge tomó posesión, el Grupo Desarrollador (GD Rumega), la empresa que ganó las licitaciones para construir los CIPIs de la Fundación “ALAS” de la cantante colombiana Shakira, tuvo en la primera etapa de la administración estatal un rápido crecimiento en Quintana Roo, obteniendo una decena de proyectos, gracias a que funcionarios de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra) le entregaron información de forma anticipada para armar y presentar las propuestas ganadoras, según quedó documentado en una serie de reportajes publicados en Noticaribe con el nombre de “Sintragate”.

En su momento, se dio a conocer que un operador político del Gobernador de Quintana Roo, que vive en Cancún, y un compadre del propio Roberto Borge, con residencia en Veracruz, formaban parte de un “grupo compacto” de amigos y socios que en mayo del 2011 crearon Grupo Desarrollador Rumega S. A. de C. V. (GD Rumega), la empresa que se convirtió en una de las “favoritas” del actual mandatario, a la que la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra) le asignó en un lapso de siete meses un total de diez licitaciones, entregándoles información de forma anticipada, eliminando a competidores y facilitándoles el proceso para que ganaran los concursos.

El operador político se llama Edgar Méndez Montoya, y el compadre es Francisco Ruiz Anitúa, ambos muy allegados al Gobernador Roberto Borge.

El resto del grupo lo integran Andrés Maiz, un empresario de Monterrey (que es el que ayer fue presentado ante Peña Nieto), y Javier Ruiz Anitúa, hermano de Francisco, que también vive en Veracruz, y que junto con éste es parte del Consorcio Intra que en esta administración construyó en Chetumal un hotel inaugurado por el propio Gobernador.

De acuerdo con un informe entregado a Noticaribe en aquella fecha, el Gobernador Roberto Borge Ángulo también sería parte de esta sociedad que desde la sombra maneja la empresa GD Rumega, obteniendo importantes concesiones del Gobierno de Quintana Roo, aunque esto no pudo documentarse.

Lo que sí quedó establecido, sin embargo, es que Borge Angulo benefició a Grupo Rumega valiéndose de la estructura corrupta de Sintra, desde donde se asignan por conveniencia obras y proyectos a empresas amigas del gobierno en turno.

En el acta constitutiva de GD Rumega, los socios de esta empresa son Cristobal Gaudiano Rovirosa y Raúl Gilberto Ramos Espinosa, pero sólo son prestanombres. El primero es empleado de Edgar Méndez y el segundo es empleado de Francisco Ruiz Anitúa en el Corsorcio Intra. Los verdaderos socios son los arriba mencionados.

Con información de El Economista.mx y Noticaribe.

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