El gobierno del estado de Quintana Roo, a través de la Secretaría Estatal de Turismo (Sedetur) y el INAH, firmaron en noviembre de 2016, un acuerdo para la “puesta en valor” de la zona arqueológica del municipio de Bacalar, la cual forma parte del periodo Pre-clásico 300 A.C.
BACALAR, Q.ROO 26 octubre, 2018.- Otros seis millones de pesos asignados para la apertura de la zona arqueológica de Ichkabal se perdieron y se deben regresar a la Federación, con lo que suman 30 millones que no podrán ser usados para detonar este atractivo turístico en el sur de Quintana Roo.
Lo anterior lo afirmó a Noticaribe la diputada presidente de la Comisión de Turismo en la XV Legislatura, Gabriela Angulo Sauri, quien indicó haberse enterado de la exigencia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a la Secretaría de Turismo de regresar este recurso.
“Ahora son 30 millones de pesos perdidos por Ichkabal, pero después resulta que la mentirosa soy yo”, dijo molesta.
Y es que, la Secretaria de Turismo en Quintana Roo, Marisol Vanegas Pérez en su comparecencia el martes 23 de octubre pasado en el Congreso del Estado, por motivo de la glosa del II Informe de Gobierno de Carlos Joaquín González, presentó unas diapositivas “nodo Ichkabal Bacalar” donde señala “las principales acciones” y en ellas se muestra la “modernización del camino de acceso”; no obstante, este medio de comunicación acudió al lugar antes señalado y resulta que no existe físicamente tal modernización, la señalética es una sola.
FIRMA DE CONVENIO
El gobierno del estado de Quintana Roo, a través de la Secretaría Estatal de Turismo (Sedetur) y el INAH, firmaron en noviembre de 2016, un acuerdo para la “puesta en valor” de la zona arqueológica del municipio de Bacalar, la cual forma parte del periodo Pre-clásico 300 A.C.
Durante la firma del convenio entre la titular de la Sedetur, Marisol Vanegas y el Coordinador Nacional de Centros INAH, José María Muñoz Bonilla, la funcionaria estatal afirmó que “se busca detonar de manera turística el sur del estado de Quintana Roo.”
Con este acuerdo, que contó con la presencia del gobernador Carlos Joaquín, en su calidad de testigo de honor, la Federación se comprometió a otorgar recursos por 11 millones 801 mil 682 pesos y el gobierno del estado invertirá fondos por 200 mil pesos. Como testigo destacó la presencia de Adriana Velázquez Morlet, delegada en Quintana Roo del INAH.
Entre las principales acciones que realizarían destacan: la investigación arqueológica, la modernización del camino de acceso a la zona, el fomento al desarrollo eco-turístico, la capacitación y fomento a la calidad del servicio, el desarrollo de productos culturales, así como la conectividad e integración de corredores arqueológicos.
Ichkabal es una zona arqueológica más alta y ancha que Chichén Itzá y más antigua que Calakmul. Está ubicada a 82 kilómetros de Chetumal, en un trayecto de 80 minutos y a 40 kilómetros del Pueblo Mágico de Bacalar, en un tiempo aproximado de 35 minutos.
Posee riqueza natural, ya que se encuentra inmersa en la reserva forestal del ejido de Bacalar, lo que permite un alto grado de conservación. A esto se suma que la región tiene gran potencial para el senderismo, avistamiento de aves y desarrollo de Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMAs) Turísticas.
Se informó que la zona de influencia de Ichkabal “recibe actualmente 100 mil visitantes anuales y con el desarrollo del proyecto, se estima un crecimiento aproximado de 20 por ciento, cada año”.
Con base en las investigaciones realizadas en el sitio y referencias históricas del INAH, se tiene la hipótesis de que Ichkabal fue el primer gran asentamiento y centro político de la región y posiblemente el origen de uno de los linajes gobernantes más importantes del Mundo Maya: el de los Señores Divinos de Kanal, el sitio puede clasificarse como uno de los precursores de la milenaria Cultura Maya.
“Con la puesta en valor de la zona arqueológica se estima una inversión privada superior a los mil millones de dólares, la construcción de habitaciones hoteleras, así como la generación de nuevos empleos que permitirán beneficiar a la población local”, se informó entonces.
MENTIRAS
En marzo de 2017, la titular de la Sedetur afirmó: “Por tratarse de una nueva zona arqueológica, Ichkabal no funcionará en su totalidad una vez que se apertura, sobre todo porque se trata de una ciudad enorme, por lo que la apertura que se pretende hacer para mitad de año será únicamente de una primera etapa que consta las dos estructuras más importantes.
“El proyecto depende de varias instancias, del INAH, de la Academia de Arqueología para la parte de las excavaciones, los recursos ya están dados y solicitados, nuevos recursos aprobados para este año, tenemos 3.5 millones adicionales destinados a señalética, todos estamos en la mejor disposición para tenerlo en este primer semestre”, aseguró.
SIMULACIÓN
“Nadie le ha metido mano al camino, es más, las lluvias lo tienen en malas condiciones y los ejidatarios no permiten el acceso a las ruinas de Ichkabal”, expresó el cuidador de dicho sitio.
En esa comparecencia, la funcionaria encargada del turismo en Quintana Roo expuso que los sitios señalados en la diapositiva, cuentan con “implementación de Conectividad (Wi-Fi) en corredores turísticos, para desarrollo comunitario e información turística”, asunto totalmente falso, pues al internarse en el camino de Bacalar a Ichkabal se pierde la señal, como se constató en reciente visita al lugar.
INFORME DE LA ASF
De acuerdo al documento de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), en manos de este medio de comunicación, en la obra con número de contrato SEDETUR.03.OBRA.FED.17, denominada “accesibilidad vial a la zona de Ichkabal, señalética y equipamiento, elemento emblemático de acceso, módulo de información y servicio relativo al programa integral Bacalar pueblo mágico (equipamiento y accesibilidad en Ichkabal)”, que presuntamente tuvo un costo de 6 millones de pesos, “se comprobó que la obra no fue ejecutada y que la documentación soporte de los pagos realizados no contiene estimaciones con los números generadores, croquis, registro fotográfico y pruebas de laboratorio, que justifiquen los conceptos de obra, cantidades y montos pagados”.
En el pliego de observaciones la ASF apunta que “Se presume un probable daño o perjuicio o ambos a la Hacienda Pública Federal por un monto de 6,000,000.00 pesos (seis millones pesos 00/100 M.N.), más los intereses generados desde su disposición hasta su reintegro a la Tesorería de la Federación”.
Al respecto, la diputada Gabriela Angulo Sauri expresó que “No puede un subsecretario de turismo mentir a una diputada, cuando tuvimos la reunión y señalar que se devolvió este dinero… En lugar de aceptar y decir cuál fue la situación por la que se devolvió, ella (Marisol Vanegas) lo niega”.
También se quejó de la omisión, puesto que no ha sido llamada a ninguna reunión en materia turística, siquiera para informarse, motivo por el que se entera de los proyectos a través de los medios de comunicación.
