Arturo Mendoza Mociño
Cancún, Q. Roo.- José Antonio Íñiguez, Aldo Revfaulknest y Luis Alberto G. Sánchez dijeron basta y se pusieron a versificar otra poesía distinta a la que domina en Quintana Roo. Primero le quitaron lo floripondiosa. Luego, lo solemne. Y al final rompieron lanzas contra Ramón Iván Suárez Caamal, Antonio Leal, Javier España, Luis Miguel Aguilar y Juan Domingo Argüelles.
No les interesa ser como ellos, ni como poetas, ni como escritores. Lo suyo, admite Íñiguez en entrevista telefónica, es tratar de romper, como generación, con sus antecesores.
Por eso presentan Cracken, un fanzine de poesía desde el Caribe para encontrar sus propios lectores y para mostrar su credo lírico.
“A la poesía peninsular le falta un contraste”, considera el poeta nacido en Cancún, en 1991, “porque en muchos sentidos es dogmática y purista. Por ejemplo, Quintana Roo parece encapsulado en una época, y en premios y en revistas se ha institucionalizado un modo de hacer y divulgar poesía”.
Y porque es sano en cualquier vida literaria, sobre todo en la poesía, el diálogo, es que nace Cracken como una publicación de bajos recursos, un fanzine que sirve, a la vez, como plataforma subversiva, de contracultura, de batalla y de difusión de ideas.
Cracken retoma el nombre de aquella bestia marina que en la antigüedad se creía que destruía navíos y que ahora sus creadores -Íñiguez, Revfaulknest y Sánchez- han modificado su nombre para crear una onomatopeya de un rompimiento generacional.
Iñiguez, 28 años repartidos en cuerpo y alma, Revfaulknest con 35 y Sánchez de 36, consideran que a la poesía de Quintana Roo le hace falta más calle, más sinceridad y menos retórica. Por eso su manifiesto literario se parece mucho al lanzado por Roberto Bolaño en la novela Los detectives salvajes.
Cracken será presentado mañana viernes 3 de mayo, a las 19:30 horas, en la Cafebrería La Mancha, Plaza Cabo Catoche, Ave. Bonampak, frente a Tec Milenio Cancún. Tel. 998. 205.7272) por Mauricio Ocampo y Miguel Ángel Meza junto con los crackeneros José Antonio Íñiguez, Aldo Revfaulknest y Luis Alberto G. Sánchez. Cupo limitado