– Cuestionado sobre el ostentoso informe de Marybel Villegas, indicó que en Morena se tienen ambiciosos desmedidos que no cambian sus formas y modales de hacer política y buscan hacerse del control del partido para ganar posiciones en los estados, con miras a la sucesión presidencial.
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de diciembre, 2019.- El dispendio demostrado el fin de semana en Cancún por la senadora Marybel Villegas Canché al rendir su informe legislativo, “es el precio que pagamos por haber invitar a ambiciosos desmedidos que están en buscan de atracar a Morena, con el fin de controlarlo y así repartirse posiciones antes de tiempo”.
Así respondió el senador José Luis Pech Várguez al ser cuestionado acerca del ostentoso informe que rindió su compañera de bancada el pasado fin de semana, con la presencia de 26 senadores de Morena, entre ellos su coordinador, Ricardo Monreal.
Ante la actitud de Monreal de respaldar las ambiciones de la senadora Villegas Canché, en un acto caracterizado por el derroche de gastos y pronunciamientos políticos adelantados, Pech Várguez respondió en entrevista radiofónica, que “Dios los hace y el Diablo los junta” pero que eso finalmente es bueno porque la gente los clasifica bajo la máxima bíblica “dime con quién andas y te diré quién eres”.
Agregó que “la lucha presidencial está aún muy lejana, pues apenas estamos terminando el primer año y ya están desbocados queriéndose quedar con el partido para repartirse todas las posiciones, como gubernaturas, diputaciones y presidencias municipales, lo cual está dañando a Morena y al proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador”.
-¿El partido no llamara a cuentas a estos “ambiciosos desmedidos”?- se le preguntó.
“Es cosa de que el partido vea el comportamiento de cada persona, porque de nada sirve que sólo se tenga una visión electorera. Espero que al final prive la cordura para no desbaratar el mejor instrumento que nos hemos dado para transformar este país, como bien lo dice el presidente de la República”, indicó el legislador quintanarroense.
Lamentó que entre los que fueron invitados a Morena mantengan viejas prácticas que solo afectan al partido y al proyecto de la 4T; “estas no son las formas que la gente espera de Morena, en cuyo proyecto mantiene la confianza y la esperanza de que en efecto logre el anhelado cambio verdadero que prometió y llevó el año pasado a la presidencia de la República a Lopez Obrador, junto con la mayoría en el Congreso de la Unión”.
En opinión de Pech Várguez, “no deben usarse las posiciones para hacer promoción personal, sin respeto a los tiempos del partido y de forma tan anticipada, aunque al final cada quien es responsable de lo que hace, aun cuando ante la opinión pública estas actuaciones generan una muy mala imagen”.
Negó que este tipo de hechos sean un síntoma de división interna en la bancada de Morena en el Senado; “solo son expresiones de algunos que ya piensan desde ahora en la sucesión presidencial y se adelantan promoviendo posiciones en los estados de la República para quienes les son afines a su proyecto”, como son los casos Ricardo Monreal y Maribel Villegas, junto con los senadores que los acompañaron.
Agregó que este tipo de acciones son las que tienen dividido al partido, “el cual tienen secuestrado, con un padrón de militantes alterado, lo que ha impedido que se puedan realizar las elecciones internas”.
Precisó que el padrón fue manipulado y entregado a destiempo a la autoridad electoral, lo que ha motivado los problemas que enfrenta el partido para la renovación de su dirigencia. Tan es así, puntualizó el senador, que “en las pasadas asambleas distritales en Quintana Roo, yo no aparecía en el padrón, a pesar de que fui dirigente estatal y candidato a gobernador y senador; después de buscar, salió mi nombre y pude participar, pero este hecho refleja cómo los que al final fueron invitados a unirse a Morena, ahora con las viejas mañas, buscan hacerse del control del partido y así tratar de desplazar a los fundadores y a los verdaderos morenos”.
