- El director del organismo en México, Cuitláhuac Gutiérrez, indicó que en el mundo son más de 10 mil aviones en tierra debido a que la crisis ha reducido la demanda de vuelos en más de 90%
Redacción
CIUDAD DE MÉXICO.- El colapso de la demanda debido a la pandemia del SARS CoV-2, que causa el nuevo coronavirus mantiene en tierra a 240 de los 300 aviones que constituyen el total de la flota de las aerolíneas mexicanas, generando costos y debilitando la frágil situación financiera de las compañías, señaló Cuitláhuac Gutiérrez, director en México de la International Air Transport Association (IATA).
Las restricciones sanitarias y el cierre de fronteras en la mayoría de los países prácticamente detuvieron a la industria de viajes, con caídas de la demanda de vuelos internacionales de más de 95% en mayo, lo que obligó a las aerolíneas de todo el mundo a dejar en tierra más de 10 mil aviones y mantener en vuelo una proporción mínima de su flota.
En los vuelos domésticos la caída de la demanda en mayo estuvo en un rango de 82 a 96% en los principales mercados del mundo, con excepción de China donde se redujo 49%.
La demanda en México cayó en esa misma proporción, ante lo cual las aerolíneas comerciales dejaron en tierra casi 80% de su flota, y lo mismo ocurrió en otros países, por lo que empezaron a circular fotografías de algunos aeropuertos con aviones estacionados en las áreas de rodaje, plataformas, en las propias pistas y en todos los espacios habidos y por haber, dijo Gutiérrez. “La aviación vive el momento más crítico en toda su historia, no hay precedente de un impacto global de las dimensiones de las que las estamos teniendo hoy en día”.
El director de la IATA en México añade que tomará de tres a cuatro años retomar el nivel de actividad que la aviación mundial tenía en 2019, el año de referencia, pues 2020 es prácticamente inexistente para efectos de actividad aérea.
México había roto la barrera de los 100 millones de pasajeros el año pasado, pero la caída súbita y estrepitosa de la actividad aérea redujo 57% los ingresos de las aerolíneas, u 8 mil 130 millones de dólares, a los que se agregan pérdidas por 6 mil 40 mdd y afectación a 148 mil 500 puestos de trabajo en el conjunto de la industria aérea, y un impacto en la economía de 14 mil 50 mdd y 691 mil empleos en riesgo.
“México es el más impactado en cuanto a empleos en riesgo en la región (AL y el Caribe), por la importancia del turismo y el tamaño de la economía”, dice Gutiérrez.
S.O.S.
Los aviones detenidos en los aeropuertos no solo se convierten en activos caros e improductivos, sino que siguen produciendo gastos como el pago por servicios aeroportuarios y de mantenimiento, que son significativos y se suman a otros como los arrendamientos.
“Como los ingresos se han agotado en gran medida, pero es necesario cubrir los costos, las compañías aéreas están enfrentando una crisis de liquidez sin precedentes”, dice un reporte de la IATA del 13 de julio, en el que pide a los gobiernos latinoamericanos apoyo urgente.
En el mundo, el mantenimiento de la flota, pagos al personal y otros gastos han llevado a las aerolíneas a consumir reservas de efectivo por 61 mil mdd sólo en el segundo trimestre del año, dice el informe, mientras que en AL y el Caribe, donde se estima en 4 mil mdd las pérdidas netas y 4.1 millones de puestos de trabajo en peligro, la pérdida de fondos ya generó que tres de las cuatro aerolíneas más grandes se acogieran al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos para reorganizar su deuda, además de que otras cuatro ya han cesado sus operaciones.
La ayuda de los gobiernos a las aerolíneas en el mundo suma 123 mil mdd, lo que equivale a 14% de los 838 mil mdd de ingresos de las compañías en 2019, pero en el caso de AL y el Caribe la promesa gubernamental es de 300 mdd, lo que equivale a 0.8% de los 38 mil mdd de ingresos de las aerolíneas de la región. “Es el porcentaje más bajo que cualquier región del mundo ha proporcionado”, dice el organismo.
En México las aerolíneas pidieron apoyo a los grupos aeroportuarios como la suspensión del cobro de servicios aeroportuarios, aterrizaje, estacionamiento, pernoctas, entre otros, a fin de sobrellevar su debilitada situación financiera, y obtuvieron respuesta positiva de los grupos aeroportuarios GAP y OMA, que les ofrecieron un paquete de ayuda en los primeros meses de la pandemia, y más tarde se sumó el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) con algunos apoyos en costos aeroportuarios, pero no tuvieron la misma suerte con ASUR, el grupo que opera el aeropuerto de Cancún.
Las conversaciones y análisis de opciones de apoyo entre aerolíneas y autoridades mexicanas continúan, dice Gutiérrez, pero declina comentar las alternativas que están bajo revisión.
En tanto, la industria aérea se dirige hacia el cuarto mes de paralización casi completa, con solo algunos pocos países reiniciando operaciones y servicios luego de los cierres de fronteras de algunos países y regiones, pero con la amenaza de nuevos brotes.